La saga Shinobi empezó en 1987 en los arcades, siguiendo la tradición de otros títulos de Sega como Princess Ninja, y convirtiéndose en un éxito instantáneo merced a una mecánica que recordaba a Rolling Thunder de Namco, pero ambientada en un universo de serie B donde un ninja (Joe Musashi) debía rescatar a un montón de niñas secuestradas de las manos de un malvado grupo de terroristas.
Su éxito ocasionó multitud de secuelas (Shadow Dancer en los arcade, Cyber Shinobi en Master System, The Revenge of Shinobi en Mega Drive) y el ser considerado como uno de los pilares del negocio de Sega, algo que se vió reforzado por las magníficas entregas para Game Gear y la tercera entrega en Mega Drive, además del homenaje con otra mascota de Sega como es Alex Kidd in Shinobi World.
Pero con la venida de los polígonos cayó en desgracia. Shinobi Legions, si bien es divertido, abusa en demasía del estilo serie Z, Revenge of Shinobi de Game Boy Advance es un verdadero desastre, y las entregas, ahora sí, con gráficos poligonales para Playstation 2 no consiguieron contentar ni a los aficionados de siempre, ni a los nuevos jugadores.
Tras dejar la franquicia en barbecho toda una generación, y tras conocer un proyecto cancelado que podía encajar en la saga, Sega decide confiar en Griptonite (parte del grupo Foundation 9) la realización de una nueva entrega. En esta ocasión es una precuela en toda regla, pues manejamos a Jiro Musashi, padre del primer protagonista de la saga.
Jiro, siguiendo la tradición fantástica del audiovisual de otorgar a los ninjas habilidades más allá de la imaginación, no sólo posee una gran agilidad y un arsenal compuesto por kunais, una katana y un gancho, sino que además puede usar diferentes magias que le facilitarán la tarea: la de fuego daña a todos los enemigos en pantalla, además de mejorar nuestro ataque a distancia; la de agua mejora nuestra agilidad; el trueno nos protege de 3 ataques; el agua nos hace invencibles, para luego dejarnos absolutamente exhaustos. El control es muy sencillo, con el stick y los botones, pudiendo elegir la magia con la pantalla táctil y echándo de menos sólamente la posibilidad de no elegir ninguna, para no activarla por error.
Pero esta entrega, además de ser muy respetuosa con la saga (y tomarla de referencia a la hora de realizar nuevos contenidos), ha tenido a bien aportar un par de elementos a tener en cuenta. El primero, y más importante, es un sistema de defensa que permite a Jiro bloquear cualquier ataque si se acciona el botón de defensa en el momento apropiado (con contraataques incluídos). La segunda, y que aprovecha este sistema de defensa, es la evaluación de cada pantalla, donde es importante derrotar el mayor número de enemigos sin ser alcanzados por ellos, lo que redunda en una mayor espectacularidad de la partida y una mejor puntuación al final de cada pantalla.
Y mientras, disfrutaremos de un juego que si bien no contiene el mejor aspecto gráfico de la plataforma, tampoco defrauda en ningún momento. Personajes realizados a base de polígonos que, salvo en determinados momentos, se mueven siempre en el mismo plano de acción, animaciones fluidas, escenas de dibujos animados para completar la historia en determinados momentos de la partida, y una banda sonora épica a la par que sencilla completan un apartado técnico sin excesos, pero resultón.
Excesos que sí se encuentran en el desarrollo de la acción, con todo tipo de enemigos y situaciones posibles, una barbaridad de extras: 4 niveles de dificultad, siendo el de principiantes más complicado que la mayoría de títulos actuales; posibilidad de revisitar las escenas ya completadas con diferentes habilidades nuevas; fases que desbloquearemos vía street pass o a través de nuestra habilidad durante la partida que rinden homenaje (no es el único homenaje que tiene este juego) al primer título de la saga; y pequeños regalos en forma de ilustraciones, vídeos, músicas o la historia de la saga. Los extras logran alargan la duración del título tanto como el jugador quiera, sin dejar de ser un título para portátil, que podemos parar cuando queramos, con un sistema para salvar partidas que funciona a las mil maravillas, de manera que ni lo hace más fácil ni nos impide salvar cuando queramos.
En resumidas cuentas, Shinobi 3D es un magnífico juego de acción y habilidad para Nintendo 3DS, que empieza con éste y otros títulos a contar con un catálogo de juegos que hacen de esta plataforma imprescindible para aquellos jugadores que no les gusta perder de vista a sus ídolos de siempre. Y si, si eras fan de la saga, debes jugar a éste juego.
Fuck yeah. Este juego no era ni de coña tan malo como me esperaba cuando lo jugué. No me lo compraría (lol, lo analicé para la revista) pero al menos no me entraron ganas de vomitar, como con el 80% del catálogo de la portátil xD
Jaja, me he acordado de cuando cogías cualquier juego y el primer botón que pulsabas era el de la magia >_<.
Pero… ¿hay cascadas con troncos o no?
La duda ofende 😀