Entretenido juego de carreras basado en coches de radio control con claro estilo off road. Si bien en las versiones táctiles (y de donde sale el nombre del juego) la gran innovación es el control haciendo que el coche siga el dedo, en la versión Minis el coche se maneja con el stick, lo que implica un control más clásico. Largo, entretenido y visualmente muy agradable, su único inconveniente es no estar pulido del todo.
Un buen juego de carreras que recuerda a determinados clásicos.
La verdad es que tiene una pinta estupenda … a ver si puedo probarlo!