Con motivo del flamante estreno de la última película de Ridley Scott, Prometheus, hemos entrado en una espiral de revisiones y recuerdos sobre la saga Alien, tanto desde el punto cinematográfico como en otras disciplinas. En lo que se refiere a los videojuegos, por regla general, las licencias de esta saga se han utilizado para producir títulos de acción con resultados bastante pobres. Desde Videoshock, con lo que nos gusta las rarezas, hemos decidido realizar una búsqueda más profunda y recordar el título que, probablemente, sea el que más se separa de esta línea. Estamos hablando de Aliens: A Comic Book Adventure.
El primer elemento curioso lo encontramos en su fecha de lanzamiento, Mayo de 1995, ya que no es posible encajarlo en la campaña de ninguna de las producciones cinematográficas, Aliens 3 había sido estrenada en 1992 y aún faltaban dos años para que llegara Aliens: Resurrection a la gran pantalla. De hecho, Aliens: A Comic Book Adventure está basado en la serie de cómics que Dark Horse Comics empezó a publicar en 1988. El desarollo fue obra de Cryo, que por aquella época tenían recién lanzados los exitosos Dragon Lore y Lost Eden, contando con su distribuidor habitual, Mindscape.
Nuestros protagonistas son los cuatro tripulantes del USS Sheridan, que acaban de despertar de la criogenización para atender a una llamada de socorro del planeta B54c. Dicho planeta ha sido colonizado para hacer trabajos de minería, pero se está utilizando también para hacer experimentos que han salido realmente mal y que han hecho que el planeta quede infestado de las criaturas que todos conocemos. El desarrollo del argumento está en la línea de los álbumes en los que está basado, por ello tenemos una historia enfocada a un público juvenil y la profundidad de la historia puede decepcionar a un público más adulto.
Aliens: A Comic Adventure es una aventura gráfica en primera persona cuya interfaz de point&click nos puede recordar a títulos como Lost in Time o Inca. Los puzles se basan en la recolección de elementos de inventario para combinar en distintas situaciones y con los cuatro tripulantes, así como la resolución de ciertos minijuegos en momentos en concreto de la aventura. En este sentido, nos encontramos con una aventura de corte serio, por lo que nos encontramos una resolución de los retos de forma bastante lógica. En la búsqueda de ese realismo, se presentan una serie de limitaciones que enrarecen y dificultan el sistema de juego, como puede ser el hecho de que los personajes solo puedan cargar hasta ocho objetos o el hecho de que hay que ir alimentando a cada uno de los personajes protagonistas. Por otro lado, existen limitaciones de tiempo para resolver las distintas secuencias de puzles, algo que puede chocar con el jugador de aventuras clásicas.
El último punto a revisar sobre sistema de juego son las secuencias de combate, donde nos encontraremos con un cambio de perspectiva, vemos a los personajes en tercera persona en una visión isométrica, se nos presenta el escenario con una malla de casillas imaginaria donde podemos mover nuestro personaje y atacar al enemigo correspondiente. Le quita algo de monotonía al título, pero es un sistema bastante simple y prescindible. En definitiva, hay intentos de innovación en el sistema de juego, pero se quedan a medio camino en casi todos sus aspectos.
El punto fuerte de Aliens: A Comic Book Adventure se encuentra en su apartado técnico. Nada más empezar se observa todo un alarde de la potencia gracias al uso del CD-Rom con unas escenas de vídeo de alta calidad y que a buen seguro hicieron las delicias de los seguidores de la saga. Cuando llega el momento del juego en sí la cosa se simplifica bastante, pero aún así es un trabajo muy loable.
El desarrollo del título se basa en escenas estáticas donde nos encontramos con los personajes diseñados con un corte de cómic, sobre un fondo renderizado en 3D de alta calidad, que transmite con efectividad las sensaciones de claustrofobia de la nave y el centro minero, también son estáticas las escenas de diálogo, donde siempre nos queda la duda de si es un homenaje al cómic o un simple recorte de gastos. De hecho, la situación deja de ser estática únicamente en ciertos desplazamientos de los personajes, al activar ciertos objetos y en las escenas de lucha (cuya calidad gráfica afea un poco el conjunto). Aunque afortunadamente en el apartado sonoro nos encontramos con unos buenos y variados efectos que, de nuevo, ayudan a la sensación de claustrofobia e intriga. La banda sonora es bastante escueta pero la ambientación es lo que pedía, por lo que no podemos catalogarlo exactamente como un mal para el juego.
Aliens: A Comic Book Adventure puede ser con bastante probabilidad el videojuego más olvidado de los relacionados con la saga, aunque pocos han sido realmente memorables, y a buen seguro que es por un buen motivo. Su falta de definición en el sistema de juego lo deja por debajo de otras aventuras de corte similar y que el apartado gráfico sea lo más destacado de una aventura nunca es una buena noticia. Sin embargo, su revisión puede resultar interesante para los fans de la saga (en especial de los cómics), que encontrarán una nueva historia que disfrutar.
Los mismos problemas que lastraban a todos los juego de Cryo. Falta de ritmo y apoyo excesivo en secuencias CGI, por suerte el tema del carisma lo salva con la licencia heredada de las películas.
Cuando era joven lo jugué un par de veces y a decir verdad no me daba más. Completamente en inglés y un “extraño” para ser una aventura gráfica. Quizá de aquella esperaba algo más clásico.
Todavía tengo guardado por casa el Lost Eden. Fue acabármelo y enterrarlo en lo más fondo de mi habitación. Se me hizo larguísimo, un tostón vamos.