La británica Edge Magazine ha publicado en sus números de febrero y marzo un reportaje dividido en dos partes que, bajo el título The Untouchables, intentaba buscarle las cosquillas y señalar las taras a sacrosantos títulos del medio, desde Grim Fandango a Super Mario Galaxy pasando por Rez o Half-Life 2, en un ejercicio que tiene poco de boutade y mucho de situarse en una nueva perspectiva desde la que comprender mejor el impacto y las virtudes de esta serie de juegos imprescindibles.
Les cuento esto porque, aprovechando el reciente lanzamiento de Mass Effect 3 y uniéndome a los fastos que esta santa casa piensa dedicarle esta semana a la trilogía de Bioware, mi intención es hacer algo parecido con esta space-opera que, salvo detalles, no ha hecho más que recibir parabienes por parte de crítica y público quienes lo han elevado a los altares de los mejores juegos de esta generación de consolas.
Aunque en realidad no podré realizar un ejercicio del todo igual al de la revista inglesa porque este tipo de análisis debería partir de la admiración y mis varios problemas con las aventuras de Shepard, la Normandía y los segadores siempre han hecho que no pudiera compartir por completo el entusiasmo con la que cada nueva entrega es recibida.
Así, groso modo, les contaré cuáles son los momentos en los que frunzo el ceño cuando juego a Mass Effect: un insuficiente y claustrofóbico sentido de la escala para una historia que se desarrolla en el Universo, un sistema de moralidad demasiado rígido con resultados poco interesantes, elecciones que permiten cambiar levemente los acontecimientos pero que provocan disparates argumentales, relaciones entre avatar y NPC artificiales en exceso (bueno, una relación con una IA SIEMPRE es artificial, pero ya me entienden), vídeos sin intensidad y poco atractivos, falta de brillo visual para un juego que está pidiendo a gritos tener el pulido gráfico de un Dead Space,… Como ven, no son pocas mis objeciones.
Para mí, todos estos problemas derivan del mismo sitio, un conflicto en la misma fórmula del juego: la tensión no resuelta que existe entre su naturaleza de RPG y su voluntad de ser un juego de acción story-driven a la manera de un blockbuster veraniego.
Todos los que ya hayan jugado a Mass Effect 3 (o los que como yo solo hayan podido probar la demo) se habrán visto obligados a elegir antes de comenzar entre tres opciones que determinan qué tipo de experiencia queremos tener: un modo acción que convierte diálogos interactivos en vídeos prefijados; un modo historia que rebaja la dificultad de los tiroteos hasta lo anecdótico; y el modo RPG que es el que ya conocíamos de entregas anteriores. Estas alternativas no solo me indican que Bioware sabe por dónde flaquea su criatura, sino también me dice que no tienen ni idea de cómo salvar la papeleta.
Esta solución a mi me vale de poco. El juego está desarrollado y pensado para ser un híbrido rol / acción por lo que capar mecánicas completas del juego lo que hace es dejarlo cojo, no reparar el problema.
En lugar de esto, yo le propongo a los chicos de Bioware que (y, por favor no me maten por lo que viene a continuación) prescindan de todo el rolazo; que digan no a las múltiples ramificaciones de la historia, que trabajen muy a fondo una única posibilidad, que eliminen incoherencias y anticlímax derivados de no tener el control total; que prescindan de personajes dibujados torpemente por las elecciones del propio jugador (algo que está muy bien en Skyrim pero que aquí no me funciona); que ahora que ya saben cómo evolucionará el juego en cada momento, cojan bien fuerte las riendas y cuiden con mimo el ritmo; que no hace falta un editor de protagonista, en su lugar que pongan atención en las expresiones faciales para que los personajes con caras de vaca mirando un prado sean cosa del pasado; que pulan el sistema de combate; que no hace falta introducir tantos personajes secundarios con los que no tengo tiempo para empatizar; que gasten recursos en hacerme sentir lo grande que es la galaxia; que me engañen para que no tener la impresión de que las ciudades son solo cuatro pasillos; que miren de reojo a Uncharted para que vean que hay muchas cosas que el juego de Naughty Dog hace y que deberían convertirse en estándar para todo aquel que quiera realizar una aventura de inspiración cinematográfica; que tomen todas las características que apuntaron con el fantástico DLC The Lair of the Shadow Broker y que las potencien, no que las obvien como hicieron en el insípido The Arrival,…
Sé que me dirán que con todos estos cambios Mass Effect ya no sería Mass Effect, que le estoy pidiendo a Bioware que dejen de hacer precisamente lo que mejor sabe hacer, que esto es un juego de rol y no hay nada malo en ello. Y es muy probable que tengan razón pero, ¡ey!, no me miren a mí. No soy yo el que se ha puesto a menear géneros ni a intentar casar la hiperépica con mecánicas, en ocasiones, tan poco dinámicas.
Sin embargo, no me gustaría que se me entendiera mal. Cualquiera de los dos primeros títulos de la saga tiene momentos de gran videojuego, algunas de sus características las disfruto enormemente (me fascina su mitología y su ultrapajera enciclopedia galáctica en forma de codex), estoy seguro que, en el futuro próximo me haré con una copia de ME3 y puedo entender a la perfección por qué para muchos de ustedes será el mejor lanzamiento del año.
Y aún así, cada vez que he jugado a cualquiera de los títulos, no puedo parar de moverme incómodo en el sofá y resoplar profundo. En realidad yo lo que quiero es un Mass Effect Fringe. Un Mass Effect de una dimensión alternativa.
No creo que el problema de Mass Effect sea la fusión entre RPG y Acción con una narrativa cinematográfica. Si te fijas, el componente rolero de ME se reduce drásticamente en ME2 (que acaba siendo un juego de tiros con diálogos).
Mas bien pienso que el primer ME se comió a Bioware, no se esperaban un éxito tan rotundo de un juego bien parido pero con miles de defectos a pulir, sabían que debían ponerlo mas “sobre raíles” pero debían disimularlo, y se quedaron en un “ni para ti ni para mi” en la segunda entrega (que considero excelente, ojo).
Llegaré virgen a la conclusión de las aventuras de Sheppard, obviando los DLC como llevo haciendo toda la generación a excepción del Borderlands, y entonces someteré mi juicio de valor. Sin embargo he de reconocer que todo lo que dices es cierto, la historia de Mass Effect es demasiado grande para como ha ido siendo contada, y ya veremos como acaba.
Coincido con Julian, la historia es demasiado buena para que funcione en un miserable videojuego. Aun habiendo leido los libros, comics y jugado a todo lo que ha salido en Iphone, sigo con ganas de mas del Universo del juego.
El cambio de mecánicas del 1 al 2, era un paso obligado para que “la gente” entrará a saco a jugarlo. EL primero tenia un verdadero conflicto con sus inventarios, y su sistema de combate era malo… pero lo suplia con algo tan increible como su ambientación, música e historia. Insuperable hasta dia de hoy para mi (en esta generación). Ysi, echo de menos mis exploraciones en mako.
La segunda parte empeoro todo salvo el combate. Dejando un juego más “entretenido” pero habiendo sido destruido en sus cimientos… la historia empeora, los personajes son menos profundos, pero en cambio tienes a una Jack y MIranda que a mi me encantan… y personalmente los hecho en falta en ME3 (que salen ojo). Aun asi mantieen ritmo, fuerza, diversión, la trama funciona y personajes como Thane y sus misiones hacen que merezca la pena jugarlo.
La toma de decisiones no son lo que son? Cierto, pero si que influye, y si que juegas partidas diferentes si tomas decisiones diferentes. Tengo 6 personajes creados y finalizados con éxito en ME1, y esos 6 personajes pasaron a ME2, y por supuesto terminando ME2 totalmente… Dlcs incluidos, y te aseguro que la parte RPG y la parte de toma de decisiones han hecho que juegue tantas veces. Para juegos lineales tengo Dead Space y Gears, para juegos donde me relajo en la nave o me lio con una, o decido que personaje prefiero tengo mi Mass Effect.
Me lo acabaré 6 veces esta tercera parte? Por ahora mi Paragon Adepto de level 46 está en el buen camino de ser la primera… mi soldado shepard asesina será mi segunda y mi asesina-buena será la tercera. Cada una liada con alguien diferente, que ha matado o ha dejado vivir a gente importante…
Es mejorable? Totalmente, y hay decisiones que han tomado que son incorrectas, que no están bien tomadas, pero aun así es el único juego que me interesa jugar este año (aun habiendo probado la beta de Diablo3) y sus razones tendrán.
Entiendo tu postura. Supongo que un juego sin rol, con el mundo de Mass Effect (que es lo que nos apasiona del juego, ni historia ni polla) bien explicado por otra vía podría ser igual de bueno.
Otra cosa es que, tal como están, me encanten, por mucho que mezclen géneros, que el primero sea muy ortopédico y el segundo demasiado shooter descerebrado. El tercero lo tengo aquí a medias, voy avanzando, feliz y contento. A ver cómo acaba.
Gracias a todos por los comentarios!
A Julián: Si, es cierto que ME2 rebaja ciertos aspectos del rolazo, pero creo que el núcleo duro del juego (ramificación de historias según decisiones, sistema de moral, gestión del grupo, exploración en busca de dinero, recursos e items,…) siguen ahí. En realidad, mi impresión general es que los cambios entre el 1 y el 2 no son tan sustanciales como pueda parecer. Por cierto, es una pena que se pierda los DLC. Mass Effect 2 tiene algunos que bien merecen que le eche un vistazo.
A Drow: Entiendo perfectamente que usted le quiera sacar todo el juego a la saga a través de varios personajes, tomando distintos caminos. Sobre el papel, a mí esta idea también me parece magnífica, pero jugándola no puedo evitar que me sepa a poco. Sin embargo, por más que esta opción no me parezca del todo atractiva, está claro que parte del éxito del juego se basa en esta característica. Y no me parece ni mal, ni un error que Bioware opte por esta fórmula.
A Bruno: Si, el principal atractivo que me impulsa a jugarlos es toda la mitología que se han montado como telón de fondo. Y ¡ojo! que no me parece que el resto sea una chufa. No es para nada un mal juego. Tiene momentos muy conseguidos y los combates son realmente divertidos.
Para todos: Pero en fin, piensen que esto que escrito soy yo fantaseando con un juego que no existe. Lo que sí existe es Mass Effect y, aunque desde luego no es santo de mi devoción, entiendo por qué tiene un público entregado que lo adora precisamente por los mismos motivos que a mí me sacan de la experiencia. Y eso no es necesariamente malo.
Quizás la sensación que tienes es la misma que se puede tener con la trilogía moderna de Star Wars: crear un universo entero de la nada con su trasfondo histórico, sus distintas razas y su amenaza a la paz no es nada fácil, y una vez que lo tienes sientes impotencia cuando lo que hacen con él no es lo que tu crees que merece.
Con Mass Effect casi todos nos enganchamos al universo, no al juego y sus defectos, que no pasaban de una buena idea. Por eso si con las secuelas la jugabilidad no ha tirado por donde cada uno de nosotros queríamos, ya fuera más roleo o más Modern Warfarismo, puedes sentirte defraudado.
Para mi Mass Effect, al que solo llevo jugadas 20 horas de la primera entrega, es el KOTOR de Bioware sin licencia. Y como tal, no me está desagradando, pero como fan (nada exagerado, pero si fan) de la saga Star Wars reconozco que de inicio me gusta más Kotor, y hasta donde he llegado como jugabilidad tb.
Con todo, Mass Effect me está molando. No tanto como Yakuza, pero que queréis, es una ambientación que me gusta mas.