No sé si es que soy muy joven o realmente sucede así pero parece que en los últimos años ha aumentado el número de análisis que destacan las referencias a la cultura popular en los diferentes videojuegos. Y normalmente lo veo como un comentario estándar de una de las virtudes de la obra. ¿Pero hasta qué punto es positivo?
No conviene empezar a ser tremendistas, existen muy buenos ejemplos del uso de las referencias y de las circunstancias sociales actuales en favor de un título. Por poner dos ejemplos podría citar el disparatado mundo postapocalíptico de Fallout, y el de Sam & Max en manos de Telltale, aún más pasado de vueltas y con conexiones directas con nuestra realidad. Entre las dos hay un factor común, por supuesto. En ambas, aunque de diferente forma, se usan estas alusiones para fundamentar o dar relieve a la sátira de la sociedad en general, y al «American way of life» entre otros muchos aspectos concretos.
Aunque la forma de mostrar referencias en esos dos títulos no es la única y son muchos los que han estado manejando este recurso a lo largo de los años. La saga Metal Gear, sin ir más lejos, siempre se ha nutrido de buena parte de la cultura fílmica de Hideo Kojima y bien conocidas son sus inspiraciones en películas como Rescate en Nueva York o Terminator. Es más, sus anteriores Snatcher y Policenauts son en parte un «homenaje» evidente a Blade Runner.
Otro ejemplo es Monkey Island, un juego que a partir de montones de referentes le dio lustre a las aventuras de piratas. Esta manera de trabajar no se quedó únicamente en el género de las clásicas aventuras, sino que se expandió y entrelazando otras obras de Lucasarts y Lucasfilms, reforzando su pequeño universo paródico repleto de metahumor para el juego. Fue un destacable comienzo, pero ambos han evolucionado por caminos distintos. Metal Gear ha ido madurando cada vez más y asimilando otras referencias culturales para crear su propio mundo y su estilo. Uno de los mejores ejemplos fue Metal Gear Solid 3: Snake Eater. En cambio Monkey Island, que acabó en manos de Telltale, ha mostrado alusiones mucho menos mordaces. La mayoría de las veces como una gracieta fácil muy poco sutil, por ejemplo haciendo una broma sobre youtube en un juego de piratas. Y para nuestro perjuicio parece que este es el modelo a seguir, lo que abunda.
No hay duda de que desde la llegada de internet la cultura se alimenta cada vez más a sí misma. Los fans analizan en comunidad cada mínimo detalle, cada pequeño punto de cualquier obra. Hasta el extremo en que en algunos casos parece ser una estrategia más de marketing para conseguir publicidad gratis. Estos aficionados son un nicho pequeño y ruidoso, pero un nicho al fin y al cabo.
Una revisión somera nos deja claro que muchas referencias son tan solo simples payasadas y a veces hasta parece que los creadores hayan perdido el norte. A uno se le puede escapar la risa floja cuando ve el poster de Final Fantasy XXVII en Deus Ex. Pero luego uno puede sencillamente repasar la Wikipedia y comprobar que, efectivamente, la saga cuenta con veintiocho entregas entre juegos principales, spin offs y secuelas (X-2, Type-0, after years...). O otro esperpéntico ejemplo sucede cuando Duke Nukem afirma «Power armor is for pussies» cuando en su propio juego existe un sistema de recuperación de vida automática. Llega un momento en que uno se pregunta de qué diablos se ríen aquellos que han planteado la broma.
¿Al final se trata de obtener de una forma fácil el cariño de los jugadores o son estrategias publicitarias? Con mi argumentación no pretendo tumbar la referencialidad en los videojuegos pero sí demostrar que si no tienen algo de trasfondo o están injertados con algo de gracia poco benefician al mundo del videojuego. Ver a un hombre con un látigo delante de la entrada de una sala que guarece a un vampiro en Magicka es demasiado burdo. Sobretodo cuando este recurso está colocado expresamente para que lo veamos, con poca sutilidad, de forma que incluso alguien que no conozca Castlevania pueda decir «Eh, ¡Esto es una referencia!«… ¿De qué demonios nos sirve?
Te voy a contestar a la pregunta, con una posibilidad que no has tenido en cuenta. PUEDE SER que los desarrolladores sean megafans de todo, y o lo ponen o revientan. Mis queridos socios, cuando hicimos Sugar Kid, no podían parar de meter referencias. Y de hecho, seguiríamos haciéndolo en base a actualizaciones si nuestro editor no la liase cada vez que actualizamos. En el siguiente juego también hay referencias. Y seguramente, así sea hasta que alguien se queje xD.
Sep, es precisamente el que creo un ejemplo muy similar al de Magicka. Pero creo que la mayoría de veces eso juega en contra de crear un imaginario propio.
Aunque también depende de cómo se lleve.Pongo por ejemplo dos videoclips: Weezer vs The Gag quartet.
http://www.youtube.com/watch?v=mghhLqu31cQ
http://www.youtube.com/watch?v=PQHPYelqr0E
Y a ambos se les nota que son unos frikazos y que les va ese rollo. Pero creo que el de Weezer lo sabe llevar mucho mejor que el otro. Ya para empezar porque es una canción original y también porque juegan con esas referencias, haciendo que formen parte del propio videoclip. Es decir, que no sólamente ponen los videos. Parece que los han puesto, pero la gente está allí (O al menos han encontrado gente que se les parece) y les saben dar la vuelta.
Ah, y no he podido jugar a Sugar Kid porque tengo Android. 😛