Tal y como sucedió con el lanzamiento de las consolas XBOX 360 y Playstation 3, la nueva consola de Sony no se ha librado de encontrarse con una cierta cantidad de consolas con defectos de fabricación, donde el más común es el de la luz azul parpadeante sobre la que ya expusieron unas comprobaciones previas a notificar la avería en los foros de su comunidad.
Mientras, desde Sony se asegura que el porcentaje de consolas defectuosas de fábrica se sitúa en un aceptable 0,4% y, además, ha puesto en marcha una medida de atención al cliente en la cual se evitan todos los trámites comunes en estas situaciones. De esta forma, una vez que el departamento de soporte recibe la llamada del usuario de la consola defectuosa —y se asegura de la veracidad de la avería—, hace el envío de un nuevo dispositivo para el intercambio con la mayor brevedad.
Por desgracia, pese a que desde Sony aseguran estar trabajando en ello, no está confirmado que esta velocidad y ausencia de trámites vayan a llegar a Europa con el esperado lanzamiento de la consola el próximo 29 de Noviembre.