Tras Bioshock uno tal vez sea algo crítico a la hora de enfrentarse a juegos de acción en primera persona que dicen ofrecer «algo más«. Y es que en el caso del éxito de Irrational Games (anteriormente conocida como 2K Boston/2K Australia) al final ese «algo más» no fue demasiada cosa, tal vez suficiente para los fans de los FPS, pero muy poco para aquellos que se acercasen a él buscando una verdadera novedad. Por ello, cuando me ofrecieron presentarme el nuevo juego de Arkane Studios recapitulé su trayectoria, el magnífico Arx Fatalis, el correcto Dark Messiah of Might and Magic, su contribución a Bioshock 2, y el juego The Crossing que no llegó a salir aunque el gobierno francés puso bastante dinero, y tampoco pude emocionarme excesivamente.

En lugar de hacer una presentación al uso me dejaron ante el juego, un auténtico «apáñatelas con él«, y de repente me encontré con un Thief: The Dark Project (el famoso juego del ladrón dirigido por Warren Spector) ambientado en una ciudad imaginaria muy del estilo de Inglaterra a principios de siglo XX repleta de steampunk donde se me encargaba el asesinato de una aristócrata en una fiesta de máscaras, tras conseguir esquivar a la guardia de la ciudad gracias a las habilidades del protagonista (Corvo Atano, por si queréis saber su nombre), nos colamos en la fiesta, cual canción de Mecano, con el objetivo de realizar la misión. El cómo colarse, o la forma de esquivar a la guardia, ya es cosa del jugador. Personalmente tiré de «poderes», Corvo tiene bastantes aunque su capacidad para enfrentarse abiertamente a muchos enemigos no es demasiado alta si lo es para esquivar a la guardia, además puede teletransportarse u ocultarse entre las sombras. Un colega cercano de otro medio accedió a la reunión objetivo escalando como pudo, otro siguió su estilo para buscar una puerta trasera por la que entrar.

Una vez dentro del convite podemos interactuar con los asistentes para realizar misiones secundarias, en mi caso acabé en un duelo a muerte con uno de los invitados, pero finalmente debemos acabar con la vida del correspondiente objetivo, una tarea que ejecutar con cuidado porque si no puedes llamar la atención de la guardia de turno. Todo el asalto ocurrió en una ambientación impecable donde los diferentes invitados mantienen su propio ritmo incluso cuando exploramos la mansión, una casa con un sonido ambiente que denota vida.

En conjunto me ha sorprendido muy gratamente Dishonored. Es cierto que venía con cierto pedigrí, pero poder probarlo con calma ha sido lo que necesitaba para apreciar sus virtudes y que pase de ser «interesante» a uno de mis esperados para este otoño. Se prevé que aparezca el 12 de Octubre para Pc, Playstation 3 y Xbox 360, y cuando salga, no os asustéis de su aspecto oscuro y dadle una oportunidad, es una verdadera sorpresa.