Esta semana se celebra el 30 aniversario del lanzamiento de un microordenador famoso, aquel que cambió de manera radical la manera en que informática y usuario se trataban por aquella época, especialmente en España y Reino Unido. Por ello, desde Videoshock hemos tenido a bien dedicar esta semana a recordar todo lo que supuso.

Lo primero es hablar de la génesis de dicho ordenador. El padre de todo esto es Sir Clive Sinclair, un inventor inglés nacido en 1940 en Londres. Con 21 años crea una empresa llamada Sinclair Radionics, donde desarrolla todo tipo de productos electrónicos, como radios o calculadoras. Tras dos cambios de nombre, en 1980 lanzan su primer ordenador, el ZX80.

Un sistema barato que para reducir más costes se podía comprar ya montado o por piezas, como si de un Tente se tratase. Por menos de 100 libras (el primer ordenador que se vendía a ese precio) se podía comprar una máquina con un Z80 Zilog (aunque a veces se usaba la versión de Nec) a 3.25 mhz , con 1kB (1024 bytes) de memoria RAM y 4 de memoria ROM. Su «sistema operativo» es una versión propia del lenguaje de programación BASIC. Tanto éste como su sucesor, el ZX81, pueden ser ampliados a 16 kB de memoria RAM. En medias, dos cambios más de nombre y un gran éxito.

Tras estos dos éxitos viene el ordenador al que rendimos homenaje hoy. Por 125 libras se podía  adquirir un ordenador que monta un Z80A muy parecido al visto anteriormente, 16 (o 48) kB de memoria RAM y de ROM. Realmente es parecido a lo visto anteriormente, pero ahora puede reproducir colores, el teclado de caucho es más sensible que la membrana anterior, y carga de programas a base de cintas de casete normales.

El Spectrum tuvo varias versiones. Primero el ZX Spectrum +, con un teclado mejor, 48 kB y un botón de reset. Después, la aportación española a la firma. Realizado por Investrónica (perteneciente a El Corte Inglés) el ZX Spectrum 128, que como su nombre indica ahora porta una memoria de 128 kB, se vendió a 44250 pesetas o 179,95 libras.

Pero antes, Sinclair lanzó otro ordenador, llamado Sinclair QL. A pesar de sus buenas características (un procesador mucho más rápido de Motorola, un sistema operativo multitarea y más memoria) el ordenador fue un fracaso. Pero con todo, ha tenido su utilidad en la historia. Fue el ordenador que forzó a Linus Torvalds a aprender a programar, y ya sabemos lo que vino después.

Posteriormente, Amstrad, una empresa que entonces era su principal rival y que aún realiza desarrollos electrónicos de todo tipo, acabó comprando Sinclair Research. Ya bajo la nueva marca, aparecen nuevas versiones de Spectrum. El primero es ZX Spectrum +2, una máquina muy parecida a ZX Spectrum 128, pero en esta ocasión el reproductor de cintas viene incluido. Finalmente, el ZX Spectrum +3, el tope de gama, que incluye una disquetera, y ciertas mejoras técnicas.

Y así, hasta 1992, donde ya existían ordenadores mucho más potentes, y el mundo del videojuego empezaba a ser dominado con mano férrea por las consolas japonesas. 10 años dan para muchos desarrollos, especialmente videojuegos, y para que muchos desarrolladores creyeran que este sistema iba a durar para siempre, algo que sólo ha conseguido hasta la actualidad el Pc. Nunca viene de más recordar a estas máquinas con las que muchos empezaron. Os dejamos los comentarios por si queréis añadir algo, pero os recordamos que toda esta semana seguiremos añadiendo material al respecto.