2010 según Raúl G. Luna

La desgracia de ser el último en resumir un año es perder la oportunidad de ser fresco o citar las evidencias como puños que todo el mundo ve, siendo el último en tu propia publicación las cosas todavía se tornan más complicadas. Así que, desprovisto de esas suculentas oportunidades, os voy a deleitar con un intento de resumen más personal si cabe que el de mis antecesores en este artículo.

Para mi uno de los pilares principales de cualquier campo es la innovación, como bien os ha comentado A. Lopez , ha sido un año muy conservador en lo que a mejoras de diseño se refiere, es de suponer que el miedo a un posible descalabro en ventas haya condicionado todos los productos.

Neil Patrick Harris dando elegancia a los Video Game Awards '10

El síndrome de las secuelas que asola la industria cinematográfica está acabando con toda la originalidad de la industria de los videojuegos, todo son segundas o terceras, incluso cuartas partes. Hasta los esperados adelantos de la espléndida gala de los premios VideoGameAwards de SpikeTV se pueden resumir con la palabra «continuaciones», tomad nota como avance de mis previsiones para el próximo año. Juegos como Mass Effect 2, pese a la impresionante factura ténica, pueden ver su diseño resumido como «igual que la primera parte, pero limada«, y con limada quiero decir que quitaron directamente todos los elementos conflictivos, toda una suerte porque algunos juegos como Fallout: New Vegas apenas han conseguido ese refinamiento. Más Call Of Duty, tiros, tiros, tiros, Profesor Layton, Mario Galaxy ¿Alguien ve cambios?

Ese miedo al fracaso ha condicionado a los pocos desarrollos que podrían haber sido novedosos. Pese a no ser secuelas sus productos cuentan con mecánicas de juego ya asentadas, historias copiadas, en el mejor de los casos mezcladas con otras, Alan Wake, Bayonetta o Vanquish. Y antes de que medio Internet (es decir nuestros cuatro amados lectores) se me tiren al cuello para decirme que es muy dificil ser original, os diré que es tremendamente fácil no serlo, si no que se lo digan a Gameloft. Esa estandarización de la que hablo permite asimilar rapidamente la mecánica por ser familiar, nos ayuda a abrazar el producto, asegura que nos divertiremos si nos gustan sus precursores, pero también hace que nos aburramos antes. La innovación engancha, nuestros cerebros buscan aprender, abrir nuevos caminos, ¿Para cuando un Call of Duty ‘1X cual Fifa/Pro?, por mi ahorrense el esfuerzo de cambiar el nombre.

Como especie tendemos a ser nuestros peores enemigos, como individuos a menudo también. Merecida o no, Activision y otras han logrado granjearse nuevamente toda la mala fama que otrora tenía. No son pocas las empresas que adquirieron en los últimos años varios estudios, el fin no era otro que intentar diversificar su oferta o conseguir limpiar su imagen con productos de mayor aceptación. Donde dije digo… muchos de esos estudios han acabado desmantelados.

Renovado, revivido, repetido

Mientras a las grandes les crecen los enanos o se estancan con nuevas iteraciones, las pequeñas y las independientes han prosperado gracias a los crecientes sistemas de distribución digital, por arriba tenéis bastantes citas de juegos independientes. Entrando más de lleno en el tema de la distribución digital, algunos nos quejábamos de Steam y sus condiciones de uso, entre tanto, la llegada de Ubisoft con su maléfico DRM o sistemas de juego en demanda como OnLive conseguían que Steam pareciese un sistema bondadoso. Afortunadamente para todos, OnLive rebajó las exigencias de sus condiciones de uso, Ubisoft parece haber desistido parcialmente en orientar todo el juego sobre sus servidores, pese a todo sigo sientiendo cierto recelo con estas opciones.

No puedo despedir esto sin hablar de otra de mis grandes decepciones, los sistemas de movimiento. Al ya estancado controlador de Wii, Microsoft y Sony añaden propuestas que podrían haber sido realmente interesantes. Sony con su PS Move apenas ha generado un clon con una idea reciclada de su viejo EyeToy, de él solo puedo decir que es asequible y que han mejorado en mucho la precisión de los sistemas antiguos, pero en teoría permite que juegos convencionales utilicen este control como «compatible». Kinect, la apuesta de Microsoft, utiliza una tecnología mucho más innovadora que la de sus competidores pero apenas existen apuestas atractivas, personalmente le auguraba un mal futuro por su desorbitado precio (casi el mismo que el de su consola, renovada y negra). Acaban de nacer y ya están sufriendo el mismo mal que los títulos con sistemas de control tradicionales, a mi me dan una sensación de uniformidad molesta.

Recapitulando, podría decir que ha sido un buen año pero para mi no ha sido un año mejor que el anterior, la sensación es demasiado agridulce, espero mucho más del futuro, llamadme iluso.