A pesar de que ya hace más de treinta y cinco años de su fallecimiento Charles Chaplin sigue siendo una figura universal y atemporal. Sus películas, con muchos años a sus espaldas, siguen estando de plena vigencia por su visión crítica y humorística de los principales defectos de la sociedad. Sin duda, es uno de los rostros más reconocibles, no solo del cine en particular, sino de la sociedad en general. Lo que no tanta gente sabe, por muy ducho que esté en su biografía, es que a finales de los 80 se llegó a desarrollar un videojuego inspirado en tan ilustre personaje.

Starring Charlie Chaplin fue desarrollado por Canvas Software, una casa que ya había trabajado anteriormente en adaptaciones de cine y televisión como Highlander o Miami Vice. para Ocean Software. Sin embargo, esta vez fue US Gold la encargada de distribuir este original producto y ERBE la que lo redistribuyó en España. Ignoro, a pesar de su gran poderío en el mundo del videojuego, si US Gold se hizo realmente con los derechos de imagen de Chaplin, sobre todo teniendo en cuenta lo duros que siempre fueron los herederos del genial cineasta, o si simplemente se aprovecharon de los múltiples vacíos legales que aún tenía el mundo del videojuego.

Las virtudes y defectos del videojuego radican en el mismo sitio, en el concepto que desde Canvas Software se le quiso dar al título. Si bien podrían haber hecho algún plataformas básico o alguna aventura gráfica con Chaplin de protagonista lo cierto es que realizaron un producto que es un verdadero homenaje a sus películas, sobre todo de la primera época, y que pone de manifiesto que, probablemente, entre los programadores había grandes aficionados al cine del realizador inglés.

En Starring Charlie Chaplin tomamos el papel de director de cine en los albores de la industria del celuloide, momento en el que es contratado por la prestigiosa productora US Gold. Se nos presentarán diversos guiones a elegir basados en filmes reales de Chaplin y, una vez escogido, nos pondremos a rodar teniendo en cuenta que dependiendo de la película nuestro coste de rodaje puede ser diferente. Cada película cuenta con una serie de escenas que podemos rodar en el orden que queramos.

En el mencionado rodaje encontramos la parte más interactiva del juego, ya que nos ponemos en la piel de Charlot y manejaremos al personaje por el set de rodaje. En la escena aparecerán una serie de coprotagonistas con los que podremos interaccionar: pegar al policía, patear un balón, acercarnos a la chica; de tal manera que tendremos que ir intercambiando acciones con los elementos del escenario hasta que terminemos el rodaje. Si no estamos contentos, podremos repetirlo, pero teniendo en cuenta el coste adicional que tendrá.

Tras el rodaje, podemos pasar a la sala de edición. Evidentemente no estamos hablando de una versión primigenia del The Movies de Peter Molyneux y las acciones de edición están limitadas a variar la velocidad de la película. Una vez que tengamos nuestra película preparada llega la hora de la verdad y pasamos al estreno en las salas de cine. Si al final de su proyección hemos conseguido arrancar suficientes sonrisas del público, la recaudación será muy buena y generará los suficientes beneficios para producir nuestra siguiente película.

Lo cierto es que Starring Charlie Chaplin brilla más en su aspecto artístico que por el jugable. Como hemos indicado, la parte interactiva se limita al momento del rodaje y la variedad de acciones es más bien escasa, además de no dejar nunca demasiado claro el tipo de acciones que terminarán siendo más positivas de cara al público. Probablemente con una mayor relevancia en la parte de la edición podría haber proporcionado una experiencia jugable más completa y no hubiese recibido tantos palos de crítica y público, ávidos de juegos de acción. Pero como adelantaba, artísticamente es otro cantar ya que se trata de todo un homenaje a la obra inicial de Chaplin en particular y al cine mudo en general. Detalles como la marquesina del cine, el set de rodaje, la claqueta, la sala de cine, todos ellos dan a entender que el aspecto gráfico se cuidó con mucho mimo y respeto a la figura representada. Además, el uso de una paleta en blanco y negro le termina de dar la ambientación perfecta a un juego que si no estuvo a la altura no fue por este aspecto.

La falta de variedad cromática es la clave para que el juego tenga un aspecto muy similar en las tres plataformas en las que fue distribuido, PC, Amstrad CPC y ZX Spectrum. Es cierto que en la versión de 16 bits hay una mejora en la resolución y en el contraste pero, por lo demás, el juego es prácticamente el mismo, incluso con una respuesta al control muy similar en todas las versiones.

Starring Charlie Chaplin fue una de esas ideas arriesgadas que no funcionó y que ha caído en el olvido. Quizá no fue el momento adecuado y en la actualidad, plagada con títulos con QTE y con juegos de esta índole para dispositivos móviles, podría haber tenido un mayor éxito. No obstante, ya solo sea por curiosidad o por simple admiración a la obra de Charles Chaplin, no está de más darle una oportunidad.